
Las muelas del juicio son las últimas piezas dentales que erupcionan en la boca y, generalmente, las que más dolores y complicaciones orales generan. Por ello, una de las preguntas más recurrentes en nuestra clínica dental en Madrid es si es necesario quitarlas una vez salgan.
Existe cierta creencia de que es obligatorio extraerlas en cuanto comienzan a erupcionar para evitar problemas, pero lo cierto es que no en todos los casos hay que hacerlo. Las muelas del juicio deben tratarse como otro molar más y examinar cómo afectan a la boca una vez hayan salido completamente para determinar el procedimiento a seguir.
Casos en los que debe extraerse
Los casos más comunes en los que es conveniente la extracción de la muela del juicio son:
- Cuando provocan apiñamiento porque no tienen suficiente espacio para crecer, lo que hace que la dentadura se mueva y perjudique el alineamiento de la sonrisa.
- Si causan infecciones (pericoronaritis) o inflamación en el tejido gingival que la rodea (gingivitis), provocando dolor y molestias al morder, abscesos y supuración. En esta situación es importante tratar la infección a tiempo para que no derive en periodontitis y dañe el hueso.
- En los casos en los que, por su posición, dificultan la higiene oral, lo que las hace más propensas a desarrollar caries.
En definitiva, la muela del juicio se extraerá cuando cause desajustes en la posición de los dientes o provoque dolores e infecciones.
En cualquier caso, será el dentista el encargado de determinar el procedimiento más adecuado a seguir por lo que, si te están saliendo estas piezas y notas cambios en tu boca o cualquier tipo de molestia, lo mejor será que acudas a tu clínica de confianza para revisar tu salud oral. En nuestra clínica dental en Madrid podemos ayudarte. ¡Pide tu cita!